Bonito Artesano en Santoña

Cuando  hablamos de bonito Angelachu estamos hablando de calidad artesana. Esta fábrica situada en Santoña elabora conservas a nivel gourmet. La anchoa es uno de lo productos más fuertes e importantes de Santoña pero no menos el Bonito en los meses de verano que es cuando se acerca a las costas de mar Cantábrico. Esta empresa tiene por compromiso solo comprar, elaborar y envasar bonito del Cantábrico en fresco en temporada costera, por lo que su calidad es aún más preciada.

Exclusividad del Cantábrico

Todo empieza en las subastas de la lonja de Santoña donde se cotizan las piezas más grandes. Una vez ya en la fábrica empieza el descabezado de este pez para dejar solamente lo que es el cuerpo y poder separar luego los lomos de la ventresca. El cuerpo de este pescado se mete a cocer durante un tiempo justo de tal manera que quede con el sabor y textura adecuada. Posteriormente se coge la pieza y se separan los lomos para hacer troncos, con la parte que no vale para hacer lomos esta se utiliza para elaborar las migas o trozos de bonito tan usadas como puede ser para ensaladas empanadillas etc. Con la parte de la ventresca hacer algo similar de tal modo que se enlatan las partes más grandes en un formato que se llama Hansa y lo más pequeño en latas convencionales. Finalizado el proceso de cocción se embotan el bonito en los diferentes formatos que ofrece esta conservera que son: Tronco, trozo, láminas y ventresca, todo ello la cocción y la manipulación son muy cuidadosas para que estos productos mantengan todas sus características y propiedades. Para la realización de la conserva se utiliza un aceite muy ligero que cubra totalmente todo el pescado. Es recomendable dejar pasar un par de meses para que el bonito se vaya  mezclando el aceite para conseguir ese punto de jugosidad y de sabor característicos de esta mezcla.

Tus mejores Platos con Formatos Gourmet

Las láminas de bonito no te dejaran indiferente, el tronco de bonito tiene un color amarillo palo sin ninguna mancha negra esto significa el perfecto tratamiento que se le ha hecho al producto, es perfecto para tostas o ensaladas. Finalmente su reposo y guarda de un año antes de su comercialización favorece un punto de consumo óptimo.